Ni todos hablamos y escribimos inglés, ni francés, ni ruso y mucho menos, los tres simultáneamente.
Incluso, aun cuando este fuera el caso, traducir un documento, especialmente si no es por razones profesionales, se convierte en una labor tediosa y aburrida.No obstante, una de las grandes ventajas de trabajar con las Google Apps, es la de poder utilizar todo el potencial de sus herramientas en cada una de ellas.
En algunas ocasiones, será necesario la instalación de algún complemento, como ya hemos visto en otras entradas.
Sin embargo, en otras, esta herramienta vendrá ya integrada en la propia aplicación.
Este es el caso del traductor de documentos dentro de Google Docs, al que podemos acceder directamente desde el menú Herramientas.
Puede que la traducción, como ya sabemos, no sea demasiado exacta, pero hay que reconocer que el traductor de Google ha ido evolucionando sistemáticamente, y cada vez los giros lingüísticos y frases hechas de cada idioma se traducen por equivalentes más ajustados en el idioma destino.
En el siguiente vídeo os mostramos lo fácil que se puede llevar a cabo.